De mil 549 antenas, actualmente activas en diversas áreas de interés social, mil 220 se agrupan en el área educativa, materializando programas de educación a distancia y fortaleciendo 193 infocentros que hoy cuentan con la conexión satelital Impulsar el sector educativo en zonas de la geografía nacional donde no llegan las redes alámbricas ha sido el eje central de acción del primer año de operaciones del satélite Simón Bolívar, en cumplimiento del objetivo principal del proyecto: Aproximar las telecomunicaciones a los centros poblados más remotos y distantes. Así lo considera el vicepresidente de la Compañía Anónima Nacional Teléfonos de Venezuela (Cantv), Franco Silva, quien dio a conocer que la instalación de antenas receptoras se ha concentrado mayoritariamente en ese sector. Explicó que de mil 549 antenas, actualmente activas en diversas áreas de interés social, mil 220 se agrupan en el área educativa, materializando programas de educación a distancia y fortaleciendo 193 infocentros que hoy cuentan con la conexión satelital. Los datos proporcionados por Silva apuntan al crecimiento de otros sectores estratégicos beneficiados con la señal del Simón Bolívar, entre ellos alimentación, defensa, salud, petróleo y energía, agricultura, seguridad ciudadana, organización y participación y medios de comunicación, los cuales reúnen el resto de las antenas instaladas. 

El objetivo del Satélite Simón Bolívar es facilitar el acceso y transmisión de servicios de datos por Internet, telefonía, televisión, telemedicina y teleeducación.^[3] Contempla cubrir todas aquellas necesidades nacionales que tienen que ver con las telecomunicaciones sobre todo en aquellos lugares con poca densidad poblacional. Igualmente, pretende consolidar los programas y proyectos ejecutados por el Estado, garantizando llegar a los lugares más remotos, colocando en esos lugares puntos de conexión con el satélite, de tal manera que se garantice en tiempo real educación, diagnóstico e información a esa población que quizás no tenga acceso a ningún medio de comunicación y formación.^[4]

El gobierno venezolano afirma que además servirá para la integración latinoamericana e impulsará a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).^[5] Uruguay cedió su órbita a Venezuela a cambio del 10% de la capacidad que tiene el satélite.^[6]

El satélite fue lanzado con éxito el 29 de octubre de 2008, desde el Centro Espacial de Xichang, en la República Popular China.^[7]